Típico concierto en el que va
mucha más gente a ver al grupo local, que al grupo que viene de fuera. Vale que
Airbag son de Málaga, pero por alguna razón, en Madrid siempre ha habido mucho
seguidor de “la escuela Nikis” y eso siempre se nota. Además de que entonces, Airbag estaban en su mejor momento y sus conciertos eran muy divertidos. Por su
parte, Darlington era un grupo estilo the Queers liderado por un tipo bastante
peculiar, aunque sin dejar de ser un poco del montón.
Una costumbre tan absurda como guardar las entradas de los conciertos, sólo puede llevarte a hacer algo aún más absurdo.
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martes, 15 de julio de 2014
domingo, 13 de julio de 2014
GROOVIE GHOULIES, Gruta 77, Madrid, 2003
Creo que fue en este concierto
en el que Kepi, antes de tocar, estuvo entre el público recogiendo peticiones.
El tipo se apuntaba en la mano con boli la canción que le pedías y luego las
iba tocando a lo largo del concierto. ¡Eso sí que es satisfacer a los fans!
jueves, 10 de julio de 2014
AIRBAG Gruta 77, Madrid, 2003
En esta época Airbag era mi
grupo español favorito, y es que no podía dejar de reconocerles el grandísimo
mérito de conseguir que me gustaran cantando en español. Las letras de los
grupos no es algo que me importe demasiado, pero cuando son en mi idioma, no
puedo evitar ser muy exigente. Primero, porque no puedes simplemente
ignorarlas, y segundo, porque el español es un idioma muy complicado para la
música, sobre todo si se trata de géneros que se han inventado en inglés. Aun
así, Airbag consiguieron grabar dos discos muy buenos: “Mondo Cretino” y
“Ensamble cohetes”, que era el que presentaban en esta gira. Unos discos de
perfecto pop punk, con letras divertidas y que quedaban bien (tampoco pido más).
Luego, sus letras fueron empeorando disco tras disco, volviéndose cada vez más tontas y cursis, razón que me impide disfrutar de sus nuevas canciones, que musicalmente
no están nada mal, por otra parte.
martes, 1 de julio de 2014
WIPEOUT WEEKEND Fabrica Llobet, Calella, 2003
No recuerdo mucho los
conciertos de este festival, pero sí que fue un plan bastante divertido. Y es
que un festival de surf en un pueblo de playa, muy mal se tiene que dar para
que no resulte bien. A pesar de que Calella sea más bien cutre y que el recinto
donde celebraban los conciertos no era el más acogedor del mundo, era gracioso
ver el ambiente de los hoteles, las terrazas y las actividades en la playa. Si
no me equivoco, este fue el último Wipeout Weekend.
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